Al inicio de cada campaña electoral, la pregunta decisiva no es solo qué prometen los candidatos, sino quiénes son en realidad. La tradición política de Occidente ha dejado un retrato del gobernante ideal que puede servir de guía al elector que busca votar con conocimiento y consentimiento, es decir, libremente. Más allá de los afectos pasiones que puedan suscitar el candidato.
Platón, en la República, enseñó que el político debe mirar siempre al bien común, por encima de las conveniencias particulares.
Aristóteles recordó que sin virtud y prudencia –phronesis– la política degenera en manipulación y cálculo vacío.
Jenofonte, en la Ciropedia, describió al rey persa Ciro como modelo de prudencia, justicia y moderación. O sea, un gobernante que servía a su pueblo en lugar de dominarlo.
Cicerón exigió que el hombre público fuera hombre de palabra: coherente entre lo que proclama y lo que vive.
Quintiliano definió al verdadero orador, y por extensión al verdadero político, como un hombre bueno, diestro en hablar.
San Agustín advirtió que ningún gobernante debe absolutizar su poder, porque la ciudad terrena nunca puede sustituir la ciudad de Dios.
En tiempos más cercanos, Chesterton nos enseñó que el humor preserva de la idolatría política, y C. S. Lewis recordó que existen valores objetivos irrenunciables –la justicia, la verdad, la dignidad humana– que deben ser la base de cualquier decisión cívica.
Por eso, al evaluar a los candidatos conviene hacerse algunas preguntas: ¿es virtuoso o solo hábil? ¿sirve al bien común o a sí mismo? ¿su palabra coincide con su vida? ¿gobernaría con prudencia y justicia, como Ciro, o con ambición desmedida?
El ciudadano que vota sin plantearse estas preguntas se deja seducir por la apariencia. El que las hace suyas contribuye a la configuración de una república fundada en la verdad y en la virtud.
Santiago del Nuevo Extremo, 25 de Septiembre del 2025.
Nota:
Las entregas de Polites News, no son artículos académicos, sino escritos de divulgación para un público general, que no siempre tiene acceso a las discusiones y autores que inspiran muchas de las ideas en boga.

El Autor: Juan Carlos Aguilera P.
Dr. Filosofía y Letras. Universidad de Navarra.
Catedrático de Filosofía. Director de Empresas Familiares.
Fundador del Club Polites.
Contacto: clubpolites@gmail.com